viernes, marzo 24, 2006

House

Realmente me gusta la serie. Ha habido muchas series televisivas dedicadas al ejercicio de la medicina, recuerdo Marcus Welby, Urgencias - el principio de la carrera del luego archiconocido Georges Clooney- y una cuyo nombre no recuerdo pero que transcurria en un hospital de Boston. La más reciente y quizás la menos verosímil es la española Hospital Central, es increible ver cómo el mismo médico que te atiende en urgencias es capaz de operar tanto corazón, como neurocirugia, como atender a un parto etc........ Con médicos así no habría especialidades que valieran y el MIR sería innecesario.
Urgencias, estaba bien, y reflejaba mejor lo que es un hospital. En USA existe la especialidad de Medicina de Urgencias cosa que no existe por aquí. Normalmente, a excepción del jefe de servicio y algunos más en los grandes hospitales , los demás son médicos generales - muchos recién licenciados que cobrán poco- o especialistas que cubren el turno de urgencias.

House adolece también de una cierta falta de realismo. El hospital es perfecto con todos los medios de diagnóstico a su alcance , no existe ningún tipo de colapso ni listas de espera, las operaciones se realizan al instante, sin más, y los aparatos más sofisticados de diagnóstico (RMN, TACS etc...) siempre están disponibles. Y por si fuera poco son de la marca Philips.

El personaje está bien dibujado, escéptico, amargado, drogadicto, sarcástico pero todas esas cualidades no bastarian para otorgarle ese carisma si no fuera por el hecho de que es un excelente médico. Intentaré explicarme un poco más.

Aunque os parezca curioso, en una extraña analogía que se utiliza mucho a título pedagógico, el acto médico se divide en tres: fe, esperanza y caridad. Sí, no os extrañeis, las virtudes teologales de la Iglesia. La fe es el diagnóstico, la esperanza es la prognosis o la probable evolución de la enfermedad y la caridad el tratamiento. Previo al ejercicio de dichas virtudes se realiza el historial clínico, que para hacerlo más pedante se acostumbra a llama anamnesis médica, en honor a un tal Platón.

Cuando acudimos al médico, por un resfriado, un golpe, un bulto anómalo o un extraño mareo o malestar en el 80% de los casos - es una cifra tomada al azar- las cosas son sencillas. Si te duele la garganta, lo más probable es que sea una simple irritación o una faringitis; si el dolor es en el pecho una bronquitis; si es un bulto o es un quiste benigno o un tumor; si te duele la espalda pués un pinzamiento, una hernía o simplemente un tirón o esguince y si es un infarto es un infarto.
El hábito, la costumbre o en algunos casos simple desidia o exceso de trabajo hace que el médico realize dichas operaciones mentales rápidamente, emita el diagnóstico y te envie al especialista que cree que corresponde a tu enfermedad.
El problema aparece cuando un dolor de garganta, no es una simple irritación; cuando el dolor de espalda no es consecuencia de un simple pinzamiento; cuando unas extrasístoles no son sencillamente producto de los nervios o de una sobrecarga de trabajo, o un mareo repentino no es una simple bajada de tensión.

House es lo que llamariamos aqui un médico internista pero además un conocedor de toda la nosología medica - copypasteo la definición
Las entidades que se clasifican son enfermedades o trastornos. Se trata de construir una taxonomía de fenómenos patológicos. Supone una organización basada en supuestos teóricos sobre la naturaleza de la enfermedad.
Es la ciencia que se encarga del estudio de la clínica de las diferentes enfermedades basado en sus signos y síntomas.

Habitualmente el diagnóstico diferencial, cuando la sintomatología de la enfermedad o de las diversas enfermedades- puede haber más de una- no cuadra exactamente con ninguna de las habituales o existen dudas., se realiza en los hospitales españoles en una reunión de los diversos especialistas. Se comparan los resultados, o pruebas y se decide de común acuerdo.

House y a su equipo se encargan, no sé si es ficción o habitual en los USA, de hacer exclusivamente ese trabajo, y el posterior que es intentar encontrar el tratamiento más adecuado. Por supuesto, sólo le llegan los casos más raros, la serie no tendría mucho interés de lo contrario, pero aún así es el paradigma de lo que debería ser un médico: no se fia del llamado ojo clínico, de la intuición; compara, descarta, analiza hasta que encuentra la enfermedad y la trata, aunque a veces se equivoque en un principio, pero rectifica y vuelve a buscar etc.

Un paradigma del método científico aplicado a la medicina, un auténtico sherlock holmes de la medicina, sabe de la importancia del historial médico y considera que los pacientes mienten o se olvidan de síntomas que pueden ser relevantes. Por eso los registros, los ataques verbales a los padres y toda esa mala leche que tanta gracia nos hace.
Dice que los enfermos no le interesan, que lo único que le interesan los enfermedades. Suena mal dicho así, cuando desde otras opciones más humanistas se predica la atención integral al enfermo, y por supuesto no está mal. Sin embargo, es capaz de saltarse todos los protocolos - una especie de guias de actuación- y el sistema hospitalario cuando cree que debe hacerlo. Esas guías además en la actualidad estan valoradas economicámente para ahorrar gastos. Se acepta, un determinado número de errores, bajas colaterales, y a correr............


En definitiva, y para no extenderme más, caracter aparte, en el fondo todos si tuvieramos que elegir médico creo que elegiriamos a House. Luego le enviaríamos a la mierda pero sanos.
Yo sin duda alguna.

Era un simple dolor de espalda cuya única particularidad era que irradiaba hacía adelante, en vez de para atrás; las pruebas sanguíneas eran normales. El bulto podía ser una simple infección que no respondía bien al antibiótico prescrito. Y algunos dolores simplemente de tipo nervioso porqué estaba pasando una mala racha.

Finalmente, y a pesar de eso, logré salirme con la mía; no era nada de eso, se trataba de un linfoma No Hodgkins, un tipo de cáncer del sistema linfático estado IV, muy agresivo. Una simple radiografía bien interpretada por un especialista -pagando- dió la pista y luego por supuesto la rápida intervención del médico de cabecera que me envió de inmediato al hospital. Y el estupendo servicio de Oncología que se esmeró. A ellos gracias, al resto como que no tantas.

Y nada más, en que me parezco a House: en nada. Excepto que cojeo un poco - secuelas de la enfermedad- y a veces utilizo un bastón para ayudarme.


P.D. De paso un consejo como en el kayak los golpes son habituales: las pomadas no hacen absolutamente nada; el principio activo no traspasa la piel. Es más el masaje que otra cosa. Si quereis que actue os haceis un pequeño corte y si no mejor via oral.
O si sois más clásicos arnica y si la lesión es reciente frío, y si no agua caliente con sal.

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